- No puedo creerlo. Todos los días, me levanto animado, creyendo que llegará esa frase... y luego nada. Cada día que pasa, aumentan las posibilidades de que llegue al día siguiente, así que mis esperanzas vuelven a renacer más y más, hasta que desaparecen de nuevo. Es terrible.
Pero me he decepcionado tanto y tan a menudo, que ya me he acostumbrado.
- Puede que te haya mandado un mensaje en los últimos cinco minutos y no lo hayas visto.
- ¡Uauh! ¡No se me había ocurrido! ¡¡VAMOS!!
- ... Evidentemente, no se ha acostumbrado.
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1 comentario:
...supongo que aunque creamos habernos acostumbrado, hay cosas que no se pueden olvidar...
chan chan chanchanchannnnchanchan
xxx
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